miércoles, 9 de diciembre de 2015

PADRE LEONARDO CASTELLANI- LA INMACULADA CONCEPCION

Inmaculada Concepción La Concepción sin Mancha de María Santísima ha sido definida como dogma de Fe hace poco más de un siglo por Pío IX; pero esta fiesta se ha celebrado desde los primeros siglos de la Iglesia, y la Iglesia ha creído siempre en eso. No hay que confundir la Concepción sin Mancha de María con la Concepción Virginal de Cristo, como hace hoy alguna gente. Que las confunda nuestro gran José Ingenieros vaya y pase, pues el gran Ingenieros fue un gran macaneador; pero que no sepa su catecismo Miguel de Unamuno en España y Víctor Hugo en Francia, eso es estupendo y muestra la ignorancia y temeridad de muchos "sabios" de hoy día. Cristo fue concebido sin obra de varón; la Virgen fue concebida sin el pecado hereditario del hombre: eso lo saben nuestros paisanos cuando rezan el Bendito: "Bendito y alabado sea el Santísimo Sacramento del Altar y la Virgen María concebida sin mancha de pecado original desde el primer instante de su ser natural". Martín Fierro sabía el Bendito, por tanto sabía también el Padrenuestro y el Avemaría. El pecado hereditario del hombre es un misterio de la Fe y hasta parece contradictorio; porque si es pecado no es hereditario y si es hereditario no es pecado; pues para que haya pecado tiene que haber voluntad. El pecado original es pecado y no es pecado: no es un pecado actual hecho por mi voluntad y que merezca castigo, es más bien un castigo; es un pecado heredado, como se hereda una enfermedad o la propensión a una enfermedad; ya que él consiste en la "concupiscencia", en el desorden de nuestra naturaleza, que nace inclinada al pecado; pero si yo NO cedo a esa mala inclinación, no me voy a ir al Infierno. Lo malo es que cedo; porque como dice el español: En esta vida torcida Quien mal anda mal acaba Y en casa del jabonero El que no cae, resbala. "Dios hizo a Adán a imagen y semejanza, varón y mujer lo hizo" —dice el Génesis. Adán en hebreo significa "el hombre": cuando Dios hizo la primera pareja hizo simplemente toda la especie humana porque puso en ella la facultad de procrear. El pecado lastimó la naturaleza misma del hombre, por tanto también la facultad de procrear. Dios puso a Adán y Eva en el Paraíso, y les dio la gracia santificante y muchos dones superiores a nuestra natura; como el don de integridad, por el cual el cuerpo estaba sujeto a la razón, y la razón a la Fe, la Fe a Dios. Nuestros primeros padres perdieron esos dones, y la culpa no fue toda de Eva, la peor culpa fue de Adán —según cuentan; y estando desnudos tuvieron que vestirse porque el cuerpo se insubordinó contra el espíritu por haberse ellos insubordinado contra Dios. El pecado cambia la naturaleza misma: apenas han pecado, se sienten cambiados y se esconden. 1. Adán ¿por qué te has escondido? 2. Porque estoy desnudo. 3. Y antes ¿no estabas desnudo? Ah, es diferente la desnudez de la inocencia y la desnudez del crimen. Entonces, si perdieron los dones gratuitos, ¿quedaron en estado de natura pura, en estado normal, como si dijéramos? No: quedaron lastimados y con una maldición encima. Pero si a mí me quitan una cosa añadida, una cosa de lujo, no quedo lastimado. ¡Ah, es que la gracia no es una cosa añadida ni de lujo! ¿Por qué? Lo más que puedo darles es una comparación: supongamos que un Príncipe nace en el palacio de un Rey y es criado para Rey, con toda clase de lujos y ventajas; supongamos que lo destronan y tiene que ir a vivir a un monte salvaje en medio de brutos animales y hombres brutos. ¿Será un hombre normal, igual que los otros? No, será inferior a los otros, que han vivido siempre en el monte. ¿Por qué? Porque no estaba hecho para vivir en el monte. Por el hecho de haber sido criado más elevado, ahora está más rebajado; y así los teólogos dicen que por el pecado original el hombre quedó "privado de lo gratuito y lastimado en lo natural": "spoliatus gratuitis, vulneratus naturalibus”. Pero el misterio sigue lo mismo, después de la comparación de Billot. Pero es un misterio patente, como si dijéramos, porque la condición del hombre mortal es tan extraña que los mismos filósofos paganos, como Platón y Aristóteles, sospecharon aquí algún misterio. Platón dijo que seguro estamos castigados por algún pecado que hicimos en otra vida; y en cierto modo tuvo razón. Aristóteles dijo que el hombre era un animal incomprensible, sin instinto regulado en el comer y en todos los placeres desenfrenadísimo: "immane animal est homo, ad cibos et venerea profligatissimus”. El dogma del pecado de origen es como la luz negra; no se ve pero ilumina lo demás: "Si se elimina ese punto oscuro, todo lo demás se vuelve oscuro", dijo Pascal. Dese pecado hereditario fue limpia la Virgen desde su primer instante. Y así no sufrió la concupiscencia, o sea la rebelión de las pasiones contra la razón; no sufrió dolores de parto, que fue la maldición de Eva, no sufrió enfermedad en su cuerpo; y la muerte si la sufrió fue porque ella quiso (y Dios quiso) seguir a su Hijo en todo. Y por eso también resucitó y fue asunta a los Cielos, siguiendo a su Hijo en todo. Quien te apela Maristela, Flor del Ángel saludada, Sin cautela No recela La tenebrosa morada. Creada Fuiste para la Deidad Y toda la Trinidad En tí se encierra y se agrada. (P. Leonardo Castellani, Domingueras Prédicas, Ed. Jauja, Mendoza, 1997, p.339-343)

lunes, 7 de diciembre de 2015

domingo, 26 de abril de 2015

MONSEÑOR POLI OBEDECIÓ A FRANCISCO

Cuando hace un mes atrás, nos enteramos por medio de un periodista amigo de que el Papa Francisco había hablado en la plaza de San Pedro con el ministro de relaciones exteriores y culto el sr. Olivieri ; peticionandole que hablara con monseñor Poli , para darle el reconocimiento jurídico a la fraternidad y todas sus congregaciones; no le creímos o nos pareció una locura, por que sabemos muy bien que cuando Bergoglio era el primado de Buenos Aires nunca se preocupo por los lefe , mas bien los combatió .                            Hoy es una realidad; sera también una realidad que le dará, lo que este periodista le comento Olivieri, que es por que  ¿se viene la firma de el reconocimiento a nivel mundial? Esto esta por verse.                                                            La otra pregunta que en la charla surgió de nuestra parte y conociendo al jesuita-peronista es si esto no es una contra medida política ante la ordenación de Williamson. El tiempo dirá la verdad.

LA FRATERNIDAD RECONOCIDA



MINISTERIO DE RELACIONES EXTERIORES 
Y CULTO SECRETARÍA DE CULTO

Resolución 25/2015


 Bs. As., 17/3/2015

  VISTO el Expediente N° 9028/2015 del Registro del MINISTERIO DE RELACIONES EXTERIORES Y CULTO, la Ley N° 24.483 y su Decreto Reglamentario N° 491 de fecha 21 de septiembre de 1995, y  CONSIDERANDO:  Que conforme al Protocolo N° 084/15 de fecha 23 de febrero de 2015, el Arzobispo de Buenos Aires, Mario Aurelio Cardenal POLI, solicita que la “FRATERNIDAD DE LOS APÓSTOLES DE JESÚS Y MARÍA” (FRATERNIDAD SACERDOTAL SAN PÍO X) sea tenida, hasta que encuentre el definitivo encuadramiento jurídico en la Iglesia Universal, como una Asociación de Derecho Diocesano, según lo normado por el canon 298 del Código de Derecho Canónico, in fieri de ser una Sociedad de Vida Apostólica, con todos los beneficios que a ésta le corresponde y dando cumplimiento a todas las obligaciones que a la misma le refiere, asumiendo también las responsabilidades que competen al Prelado diocesano.  Que dicha fraternidad, encuentra acreditada su carácter de persona jurídica pública dentro de la IGLESIA CATÓLICA APOSTÓLICA ROMANA, conforme las normas del Código de Derecho Canónico.  Que según sus estatutos, aprobados por la autoridad eclesiástica competente, la fraternidad es una sociedad sacerdotal de vida común sin votos, a imitación de las sociedades de las Misiones Extranjeras (conf. Capítulo I, Artículo 1°, Estatutos de la Fraternidad de los Apóstoles de Jesús y María).  Que el Artículo 3°, inciso f) del Decreto N° 491/95 autoriza la inscripción en el Registro creado por Ley N° 24.483, a las personas jurídicas reconocidas por la autoridad eclesiástica, que guardan semejanza o analogía con los institutos de vida consagrada y sociedades de vida apostólica.  Que la institución solicitante ha cumplido con todos los requisitos exigidos por la normativa vigente, acompañando sus estatutos, decreto de erección y memoria, de acuerdo a lo establecido por la Ley N° 24.483.  Que corresponde hacer lugar a la presente inscripción toda vez que la peticionante encuadra en los términos previstos por el Artículo 3°, inciso f) del Decreto N° 491/95.  Que la presente medida se dicta en uso de las facultades conferidas por el Artículo 17 del Decreto N° 491/95.  Por ello, 

 EL SECRETARIO DE CULTO RESUELVE:

  ARTÍCULO 1° — Reconócese como persona jurídica a la “FRATERNIDAD DE LOS APÓSTOLES DE JESÚS Y MARÍA” (FRATERNIDAD SACERDOTAL SAN PÍO X), Asociación de Derecho Diocesano, con sede legal y domicilio especial en la calle Venezuela N° 1318, CIUDAD AUTÓNOMA DE BUENOS AIRES, la que queda inscripta bajo el número TRESCIENTOS OCHENTA Y UNO (381) del Registro de Institutos de Vida Consagrada.

  ARTÍCULO 2° — Otórgase a dicha entidad el carácter de entidad de bien público a todos los efectos que correspondan.

  ARTÍCULO 3° — Hágase saber que la referida persona jurídica se encuentra beneficiada por el tratamiento dispensado por el Artículo 20, inciso e) de la Ley de Impuesto a las Ganancias (texto ordenado en 1997).

  ARTÍCULO 4° — Comuníquese, publíquese, dése a la Dirección Nacional del Registro Oficial y archívese. — Emb. GUILLERMO R. OLIVERI, Secretario de Culto.

domingo, 22 de febrero de 2015

HASTA PRONTO ANIBAL D`ANGELO

 EL DÍA 21 DE FEBRERO, FALLECIÓ EL PROFESOR ANIBAL D`ANGELO ( PAPI ). LOS QUE TUVIMOS EL HONOR DE CONOCERLO LO DESPEDIMOS Y LE DAMOS GRACIAS , HASTA PRONTO PROFESOR.

domingo, 4 de enero de 2015

OTRO MISERICORDIADO POR FRANCISCO

Carta del Obispo, Monseñor don Rogelio Livieres, con ocasión de la ordenación de un nuevo Obispo de la diócesis de Ciudad del Este:
"Yo no asistiré a la ordenación episcopal del nuevo Obispo de Ciudad del Este. Aunque él personalmente no tiene nada que ver con mis problemas con la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP), no quiero estar con los obispos de la CEP como si aquí no hubiera ocurrido nada. 
Había decidido guardar silencio sobre lo ocurrido con la penosa Visita Apostólica a la Diócesis de Ciudad del Este y a mi posterior destitución como Obispo de ella, al ser declarada por el Vaticano como “sede vacante”. Sin embargo, el Sr. Arzobispo de Asunción, Monseñor Edmundo Valenzuela, ha vuelto sobre el tema en una entrevista brindada al diario ABC Color, en su edición del pasado 8 de diciembre, expresando sus deseos de que este domingo, día fijado para la ordenación del nuevo Obispo de Ciudad del Este, los Obispos del Paraguay me abracen y yo a ellos, como símbolo de comunión. También realiza una serie de consideraciones que reclaman mis agradecimientos, por un lado, así como algunas precisiones y reflexiones, por el otro. 
En primer término, me reconforta que el Arzobispo haya dejado absolutamente en claro que el problema suscitado, que tuvo amplia divulgación en los medios de prensa, se debió a un problema de «crisis por comunión interna», es decir, de relaciones entre mi persona y los otros Obispos del Paraguay. En efecto, no hubo otro fundamento, sea éste de orden financiero, sexual o doctrinal, como falsamente algunos sospechaban, sino exclusivamente a la «falta de comunión». 
Agradezco también a Mons. Valenzuela que haya reconocido lo que tantas veces había afirmado: los problemas de «comunión» comenzaron antes incluso de que yo ponga un pie en la Diócesis de Ciudad del Este, con el solo hecho de mi nombramiento como Obispo por parte de san Juan Pablo II. Claramente, esto indica que no se trataba de un mal relacionamiento de carácter personal –comenzaron antes de que me conocieran. 
¿Cuál es, entonces, la causa de los conflictos que comenzaron hace más de 10 años? En ese momento, los Obispos querían para Ciudad del Este un Pastor que compartiera con ellos su misma visión y modelo de Iglesia. Como pensaron que yo no «encajaba» en su paradigma, protestaron a la Santa Sede, pidiendo que revocara mi nombramiento. Pero Roma se mantuvo firme y me «impuso» contra el parecer de la Conferencia Episcopal.
De hecho, y a pedido del Papa Benedicto, yo desarrollé un modelo pastoral distinto, cuyo eje principal fue la creación de un nuevo Seminario diocesano. Y abundancia de sacramentos. He ahí la raíz de las desavenencias. 
Hoy muchos, incluso entre los mismos Obispos, reconocen el dinamismo y los buenos frutos que se han producido en Ciudad del Este. Frutos muy grandes que han cambiado el perfil espiritual de nuestra querida Diócesis. Sin embargo, aquí el juicio del árbol no se hace en base a los frutos, sino a la importancia que le dan a la uniformidad monolítica entre los Obispos, a la que erróneamente se define como «comunión». Las tradiciones y normas «de los hombres» de Iglesia son más importantes que las sorpresas de Dios y las normas de la fe y la doctrina. 
El Sr. Arzobispo, en su entrevista, reconoció que el Obispo es la máxima autoridad pastoral en la diócesis que Dios mismo le encomendó. Sin embargo, aquí siguiendo la lógica de la unidad monolítica, destacó que dicha autoridad se debe ejercer siguiendo las orientaciones de la Conferencia Episcopal. A los Obispos en comunión con todo el colegio episcopal del mundo y al Papa los estableció Jesucristo, como fundamento de su Iglesia. Las Conferencias Episcopales, por su parte, son sólo creaciones humanas que se consolidaron recién a mediados del siglo pasado –con todas las ventajas y desventajas que las cosas humanas tienen. La comunión de los Obispos en el colegio episcopal, por lo tanto, no pasa por la conformidad con las recomendaciones que tenga a bien una Conferencia Episcopal sugerir a sus miembros. Pero, insisto, las tradiciones y normas humanas terminan imponiéndose con más fuerza que las leyes de Dios. Esto técnicamente se llama fariseísmo, ya Jesucristo había señalado este modo de ver las cosas problemático, pero típico, dentro de la religión. Las únicas autoridades que Dios ha constituido en su Iglesia, y sobre la que esta se edifica, son el Obispo de Roma, sucesor del Apóstol Pedro, y los Obispos en sus diócesis, sucesores de los otros Apóstoles. Las Conferencias Episcopales, de suyo, no tienen autoridad alguna sobre los Obispos. Sólo las delegadas por la autoridad de la Santa Sede que, de hecho, ha delegado muy poco a las mismas. 
El Concilio Vaticano II reafirmó la autoridad divina de los Obispos frente una indebida centralización vaticana que se había venido imponiendo –como otra de tantas tradiciones humanas– especialmente después del Concilio Vaticano I y su proclamación de la infalibilidad del Papa y su suprema autoridad. 
En otro frente, me entristeció ver que el Sr. Arzobispo manifestara que yo debía volver a un estado de comunión no sólo con la Conferencia Episcopal, sino también con el Papa Francisco. Siempre he estado en comunión con todos los Papas y siempre lo seguiré estando. Incluso cuando me tocó asentir a la decisión de mi destitución como Obispo. Y esto a pesar de que, personalmente y en el juicio de mi conciencia, considero esta decisión como injusta procesalmente, infundada en cuanto a la substancia de la causa, arbitraria y atentatoria contra la legítima autoridad que Dios ha dado a los Obispos como sucesores de los Apóstoles, y totalmente contraria a lo enseñado por el Concilio Vaticano II. En breve, un abuso de autoridad, que en buen cristiano se llama un acto tiránico y dictatorial. Pero como no hay autoridad en la tierra superior a la del Papa, he acatado sin resistirme, precisamente, como expresión extrema de mi comunión con el sucesor de Pedro, a pesar de que me retirara el apoyo que los anteriores Papas me habían dado en esta misma causa. 
Que el Papa tenga que rendir cuentas ante Dios por este acto que considero malo no tiene nada de raro ni de polémico. Como tantos Papas que han condenado o mandado a la hoguera equivocadamente. Es una simple verdad de fe: tendremos, todos, que dar cuentas de cada uno de nuestros actos a Dios. Especialmente los más poderosos, los que más autoridad han ejercido en nombre de Dios. No creo, por lo tanto, haber sido irrespetuoso, sino franco y al mismo tiempo un disciplinado hijo de la Iglesia. A pesar de lo injusto obrado, preferí someterme – sin renunciar – a los requerimientos pontificios para evitar mayores males a las obras que yo habría promovido, principalmente los seminarios. Pero igual le pedí disculpas si mis expresiones pudieran haberse considerado como una ofensa a su supremo oficio o persona sagrada. 
En cuanto a la «revisión» de mi caso a la que Mons. Valenzuela se refiere, la única forma de cambiar algo mal fundado y mal decido es, sencillamente, volver atrás. Pero eso no es algo que a los hombres nos resulte fácil, incluso cuando nos hemos equivocado gravemente, como creo que ha sido en mi caso. 
Yo colaboraré con el nuevo Obispo, si él lo desea, en la ayuda a las instituciones creadas por mí y también otras, si me pareciera conveniente. Hay que tener en cuenta que duramente mi servicio a la Diócesis, los bautismos se triplicaron; las bodas se duplicaron y ordené a 70 sacerdotes, cosa que no ha ocurrido en todo el Paraguay, juntas las Diócesis, aletargadas desde hace decenios. Así es que tengo qué dar.
Le deseo éxito al nuevo Obispo. 

+Rogelio Livieres, Ex-Obispo de Ciudad del Este